Quiéreme si te atreves...

Un viaje hacia el corazón

23 diciembre 2005

Me desperté y no estabas...

Esta noche no ha sido como otras...

Me he despertado angustiada, nerviosa, sudando sin saber dónde estabas.

Había pasado corriendo toda la noche detrás tuyo, pidiéndote que me hablaras, que me dijeras que te pasaba y tú, sólo mirabas mis ojos y sonreias... era como si fuera un espectro, una fantasía en tu mente.

Te reprochaba que no contestaras, que no me miraras como la primera vez que me dijiste te quiero, que no me besaras como cuando dijiste que mis labios sabía a miel de azahar, que no me abrazaras cual osito de peluche....

Te llamaba y no contestabas.

Y cuando por fín estaba a punto de tocarte de nuevo... te esfumabas!!! El maldito despertador sonó antes de que pudiera volver a abrazarte y decirte lo mucho que te quiero.

Quería volver a dormir. Dormir para volverte a ver y pedirte que no me dejaras, que eras lo más importante de mi vida... pero Morfeo una vez más.... se había ido, me había abandonado.

Me levanté sobresaltada, imaginando que no estabas, que nunca más volverías a estarlo... y esa angustia se apoderó de mi.

Entonces sucedió, mi teléfono móvil empezó a sonar.

Era un mensaje tuyo dándome los buenos días y diciéndome lo mucho que me querías...

Todo había sido un sueño. Un mal sueño del que logré despertar a tiempo y en el que te perdía.

Espero seguir recibiendo cada mañana la señal de que nunca me dejarás...

Yo más!!!!





1 comentarios:

A las viernes, 23 diciembre, 2005 , Blogger Falkon ha dicho...

No hagas caso de los sueños, que siempre mienten. Nunca desapareceré, nunca me esfumaré, estaré contigo como el sol cada mañana, como el aire que acaricia tu piel, como el agua que refrescará tu sed. Siempre que lo desees, estaré ahí. No sueñes más, quiero que esto sea real.

Te adoro mi bella durmiente.

 

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio